¿Cuándo es el momento de comenzar a realizarse tratamientos faciales ? Más allá de los cuidados básicos, como aplicación de cremas, protección solar, limpiezas o higiene faciales, llega un momento en que falta algo… ¿Hay una edad “crítica” para comenzar?…
Biológicamente , el “envejecimiento” (que mal suena) comienza… ¡sobre los 30 años! Sí, realmente, nos pasamos la vida envejeciendo. Nuestras células han comenzado disminuir su capacidad de reparación y multiplicación, lo que se traduce en una disminución y ralentizamiento en la producción de colágeno.
Por supuesto, no es inmediato, sino que muy lentamente aparecen zonas donde la cohesión de las capas de la piel no es perfecta y zonas con pequeñas roturas en las fibras de colágeno. Empiezan las primeras arrugas, especialmente en zonas de gran movilidad, como frente, ojos,y laterales de la boca.
Por ello, la tendencia actual y lógica consiste en comenzar con tratamientos en la década de los 30, dirigidos a potenciar y estimular el colágeno, favorecer su calidad y velocidad de producción.
Hablamos de tratamientos como los peelings para renovar la superficie de la piel y crear capas de piel “nueva” o como la Mesoterapia Facial o Mesolift, donde infiltramos mínimas cantidades de sustancias necesarias para activar la síntesis de elastina, Ácido Hialurónico, colágeno.. ¿Y qué podemos infiltrar? Vitaminas, antioxidantes para reparar el daño producido en las células, enzimas, que actúan como activadores en reacciones químicas, Ácido Hialurónico, como agente hidratante y equilibrador del colágeno, activos homeopáticos para regular las reacciones biológicas…
Pero no todo el mundo puede (o quiere comenzar) “tan pronto” y acuden a la consulta de Medicina Estética cuando hay que “curar” más que prevenir, cuando ya existe un daño en la piel, llámese arruga, daño solar ( manchas, envejecimiento prematuro ) o flacidez.
En estos casos podemos paliar y reducir los daños, pero no eliminarlos. Generalmente ,se busca una soluci
No hay una técnica ideal. Cada una tiene sus ventajas y limitaciones. La combinación de varias dan buenos y duraderos resultados. Y, sea la edad que sea, la belleza de un sonrisa es eterna.